Viajando como una pluma

"Vive como si fueras a morir mañana. Aprende como si fueras a vivir siempre." Mahatma Gandhi (1869-1948).

Después de desprenderme de esa mochila emocional, así es como me siento: liviana, ilusionada, decidida, libre, caminado por la vida y viajando ligera como una pluma. Apasionada por viajar, aquí os presento mi experiencia personal, acerca de mi Viaje...

¡El fascinante viaje de Vivir!

"La Vida es un gran viaje, todos somos viajer@s de este mundo." Lara

¿Nos vamos viajer@s?

Faada

20 de junio de 2013

Ese querido pueblo llamado Samrong Village (voluntariado)

"Samrong Village School of Opportunity" (BambooGrass) así se llama la escuela donde he realizado mi primer voluntariado.


Pero, ¿dónde está Samrong Village?

Más información: Bamboo Grass.


Después de consultar con el conductor del Tuk-tuk si sabía dónde estaba Samrong Village y confirmarme que sí, cargo la mochila y nos vamos hacia allí.

Estoy muy emocionada, ya que va a ser mi primera experiencia como voluntaria en una escuela de niños. No sé muy bien qué es lo que me voy a encontrar allí, sólo la información que he visto en la web y poco más...

Después de una hora de camino, y de varias llamadas a Mr. Laim Len, el fundador de la escuela, conseguimos llegar a Samrong Village. Imaginaros dónde estará este pueblo que hasta el conductor se ha perdido!!

Mi primer pensamiento al llegar aquí ha sido: "¿has hecho bien Lara en venir aquí?". Estoy sola, en un lugar perdido en Camboya, con 5 personas que no hablan nada de Inglés y unos cuantos niños mirándome extrañados.

Una mezcla de sentimientos y pensamientos recorren mi mente y como no, mi gran enemigo "el miedo" aparece sonriente (oportunista donde los haya), de poder alimentarse durante un instante de mi temida debilidad.

Intento desviar y cambiar mis pensamientos y me digo a mí misma: "Lara, esto lo has atraído tú, es lo que querías, déjate llevar por el momento e intenta disfrutar de ello, no va a pasarte nada. ¡¡Fluye!!"
Automáticamente mi estado cambia y empiezo a sentirme mejor. Los niños, con el poco inglés que hablan, me llevan de la mano hacia la escuela: "ha llegado una extranjera, ¡qué divertido!" 

Al cabo de media hora, escribiendo en la pizarra cómo me llamo, de dónde vengo, cuántos años tengo, etc... me quedo ¡estupefacta! Empiezan a entrar niños y más niños, ¡hasta un total de 52!
La escuela

Los niños dándome la bienvenida
Y aquí los tenéis a todos ellos súper interesados en mí; qué nervios, ¡mi primera clase de inglés! 

Aunque parezca mentira, todo un reto para mí...No podéis imaginaros el interés que tienen estos niños por aprender, son las 15.30 pm. y han venido todos a ver a la nueva "teacher"! Así es como me llaman. Después de 1 hora, salimos a jugar al patio y observo cómo actúan: las niñas juegan a la goma, como nostras cuando eramos pequeñas, los niños al pilla-pilla, etc... ¡y todos me observan y sonríen sin parar! 

La única diferencia, es que aquí andan todo el día descalzos y su ropa está sucísima, más adelante entenderéis porqué!





Así es Samrong village

Se encuentra a 45 km de Siem Reap (la capital de provincia). Zona rural, todas las familias viven de la agricultura, mayoritariamente del cultivo de arroz. Sus viviendas, casas de madera y techos de hojas de palmera, están construidas sobre pilares para protegerse de la estación de lluvias. 

Aquí no hay agua corriente, ni electricidad, necesitan un generador que encienden un par de días a la semana, con el que conectan la bomba que les suministra el agua de un pozo. El resto de días, se iluminan gracias a unas luces portátiles que cargan con unos pequeños paneles solares (regalo de la organización que ayuda económicamente a la escuela, sin ánimo de lucro: One Degree forward). También utilizan linternas con batería recargable. 

Las calles, obviamente están sin asfaltar y el medio de transporte es la bicicleta o la moto y también carros tirados por bueyes. Aquí se genera muchísima basura, no hay servicio de recogida, etc... todo lo orgánico va al suelo, ya que los propios animales (cerdos, gallinas, patos, perros) se lo comen. El resto (plásticos, papeles, etc.) simplemente lo queman. Un desastre para el medio ambiente, ¡pero no hay medios! El gobierno no invierte ni un duro.

























MI CAMPAMENTO

¡Aquí os presento mi campamento! Es lo peor que he llevado, el tema de dormir en el suelo, sin ningún tipo de esterilla o colchón (no la he necesitado en todo este tiempo!). He pasado unas noches horribles, la verdad. Además con el agravante de los horarios: se levantan al amanecer, 5.30 am y se acuestan a las 9.00 pm, debido a los pocos recursos de luz que hay.


Ducharme en el lavabo al lado de las letrinas, con cubos de agua... no ha sido problema; comer "cada día" arroz con verdura y sandía, tampoco. Pero el tema de dormir ha sido lo más ¡duro de todo! 

Muy importante el tema de la mosquitera, a través de la picadura de un mosquito (llamado Vector) puedes contraer el Dengue, enfermedad infectocontagiosa grave, ocasionada por un virus. Más información: http://www.medicinayprevencion.com/dengue.html
¡Siempre a mano el repelente de mosquitos!

Otro punto importante el agua potable. Ellos utilizan un sistema de filtrado y la potabilizan. Imposible beber de ese agua, si no quieres pillar una gastroenteritis de caballo. Siempre agua embotellada (incluso para lavarse los dientes), el agua contiene muchísimas bacterias y los occidentales no estamos inmunizados! La podía comprar en los puestecitos que están a pie de calle... siempre agua embotellada. Ellos son encantadores y te la ofrecen, pero muy amablemente les explicas que no puedes, que puedes caer enfermo y lo entienden perfectamente.


















No hay colchón :-(

¡Listo para dormir!
Mi colaboración, durante los días que he estado en Samrong, ha sido la de realizar dos clases de inglés al día: a las 17.00 pm (niños de 6 a 15 años) y a las 18:00 pm (niños entre 9 y 17 años, pero con un nivel más alto de inglés). Durante el resto del día, he podido pasear por el pueblo, charlar con los vecinos (como podía, ya que no hablan nada de inglés), o simplemente relajarme en una hamaca. Aquí no hay mucha cosa que hacer, sólo ver pasar las horas e intentar compartir con ellos tus experiencias. Además el calor y la humedad te impiden realizar cualquier actividad que requiera esfuerzo físico, así que a ¡relajarse!

Ha habido muchas horas muertas, donde te preguntas muchas cosas, ¿qué haces desde las 5.30 am hasta las 17.00 pm? Difícil cuando estás sola y no puedes mantener una conversación medianamente normal. Sophy, la verdadera teacher, trabaja por las mañanas como profesora en la escuela secundaria, los niños van al colegio y vuelven a las 11.30 (la hora de comer aquí), así que la mayoría del tiempo he estado con adultos y niños muy pequeños que no hablaban nada de inglés. 

Una no esta acostumbrada a no hacer nada, a no tener Internet y es en estos momentos donde aparece la ansiedad!! Pero gracias a ellos, a observar como transcurre su día a día, he ido integrándome en su "modus vivendi" he conseguido no pensar en lo que hacía en España y sobrellevarlo de la mejor manera posible... 
La siesta de la abuela


Pero sobre todo y lo que sí puedo asegurar, es que he vivido momentos que ¡no olvidaré jamás!


Anécdota: Sábado 15 de Junio del 2013 
 Lara's Birthday

Es la hora de dar clase, así que voy hacia la escuela. Antes de llegar, tienes que pasar por la casa de los padres de Laim, el fundador de la escuela. Pues allí me están esperando todos los niños!

No entiendo nada, ¿qué hacen aquí? Vamos todos juntos a la clase y comienzo a entender lo que está pasando... cada uno de ellos ha preparado un cucurucho de cartulina azul, con un ramillete de florecillas que han cogido del campo! ¿Os lo podéis creer? Otros, con la misma cartulina, han hecho unas cajitas y han metido caramelitos dentro... esto no tiene precio!!! La emoción se apodera de mí, ¡estoy exhausta! 

¡¡Es mi cumpleaños y se han acordado!!

Durante mi presentación les expliqué que el día 15 de junio era mi cumpleaños... et voilà! Ahí están ellos, súper ilusionados y con su regalito en mano!!

No olvidaré jamás mi 37 cumpleaños!! Gracias queridos niños por enseñarme tanto, por ayudarme a descubrir nuevos sentimientos y que fluyan mis emociones, ¡en estado puro! ¡Os quiero con toda mi Alma!!



¡Los regalos que me han preparado!























Para celebrar mi cumpleaños, en compañía de la familia que me acoge (my Homestay), le he propuesto a Sophy cocinar ¡una tortilla de patatas! 

No fui consciente hasta el momento de ponerme manos a la obra, de que tenía que cocinarla a la leña... controlar la intensidad del fuego, fue una tarea complicada! Con el hándicap de que todo el humo me venía a la cara, un escozor de ojos... ahí fue cuando dije: menudo mérito tiene cocinar ¡cada día así!

No somos conscientes de las comodidades que tenemos, hasta que dejamos de tenerlas. Y ahí es cuando gané consciencia acerca de la dureza de vivir en el campo y en Camboya! Pero a pesar de que en la primera especie de sartén, se me pegaron las patatas, no desistí y aquí os muestro el resultado!

Todos encantados, nunca un extranjero de los que había estado allí había cocinado para ellos, era la primera vez que comían un plato que no fuera Camboyano! 

Y ahora lo entiendo: nadie fue tan inconsciente como yo para atreverse... ¡Menuda aventura!

¡Bon profit!
¡Spanish omelette!
 




Y así pasan los días en Samrong, con estas maravillosas personas, de las que tanto tenemos que aprender. Un ejemplo para todos y lo mucho que me han enseñado ellos a mí!!!

Es curioso, como a lo largo de los días, la relación con los adultos cambia: lo que en un principio podía aparentar una barrera, el idioma, al cabo de un par de días desaparece. Me he ganado su confianza, con mis gestos, mi conducta y poco a poco se estrechan los lazos. En ese preciso momento, la barrera comunicativa desparece por completo. Con signos, con gestos, intentan comunicarse conmigo. Incluso me ensañan algunas palabras en Khmer, su lengua nativa. Intuitivamente, imagino lo que me están diciendo y ahí es cuando saltan las carcajadas!!! Y acabamos todos riendo al ver lo cómico de la situación.

Es maravilloso experimentar esto. Esta gente me ha aceptado en su familia y me lo está haciendo saber... no soy una simple voluntaria, ya hay abrazos y ¡gestos de cariño!

¿Quién es Sophy?


Sophy, esta increíble chica de 25 años, chiquitita, menudita, tímida, reservada, encantadora y con un corazón enorme. Que trabaja de lunes a viernes, que se levanta a las 5.30h cada día para cumplir con sus obligaciones en la casa familiar, vive con sus tíos, ya que su madre murió a los tres meses de nacer ella y el padre falleció hace un par de años. Por las mañanas trabaja para el gobierno en una escuela de secundaria, a 15 km, por lo que percibe 50$ al mes. Por las tardes, sin excepción, da clases de inglés en el escuela de Samrong Village de la que es, junto a su prima Sa, co-fundadora. Y el fin de semana, tiene que ir hasta Siem Reap, a 45 km, para acabar sus estudios superiores de Inglés. Así que todo su tiempo está dedicado a estudiar y a enseñar inglés, su gran pasión. No ha salido nunca de la provincia, pero espera poder hacerlo pronto. Y yo espero y deseo que todos sus sueños se hagan realidad! 

Llega el momento más duro para mí, el día de mi partida. Antes de marcharme, le doy un gran abrazo a Sophy, y las dos nos echamos a llorar!! No me imaginaba que eso iba a pasar, pero realmente esta chica me ha tocado el corazón y por lo que se ve, yo a ella también. 

Hemos compartido muy buenos momentos juntas, enseñando a los niños en la escuela, les he enseñado un poco de Español a todos, hemos bailado Tango, Salsa y Flamenco... ha sido muy divertido, no para de decirme que esperaba volver a verme algún día! 

Gracias Sophy, por demostrarme que con pasión y dedicación, todo es posible!! ¡Siempre en mi corazón! 

Gracias a toda la familia de Laim y de Shopy, por acogerme y tratarme como a uno más de la familia!! 

Y aquí os dejo con esta increíble y querida comunidad, la familia, la escuela, los niños, sus costumbres, su entorno... en definitiva, ¡su VIDA!




Mamá de Laim, Sophy y una vecina.







Mami, preparando las ofrendas














  
 Que niña más bonita... ¡Bye, bye little rat!



LLAMAMIENTO:

La única manera que tengo de ayudar a estos niños, es ofreciendo mi tiempo y enseñándoles mis conocimientos, mi experiencia, ofrecerles todo mi cariño y arrancarles una sonrisa mientras pueda (aunque eso ha sido tarea fácil, siempre sonríen). 

Pero agradecería a todos vosotros, los que me seguís, familiares y amigos, a todos los lectores de este blog, que dedicarais unos minutos a reflexionar. 

Con tan sólo un dólar al día (0,75 euros), es decir (30$ US) se puede ayudar a que tengan bicicletas para poder ir a la escuela. Muchos de ellos tienen que recorrer cada día 10 Km hasta llegar al colegio. Cualquier aportación, por pequeña que sea, puede ayudar a estos niños a que su día a día sea mucho mejor. Se puede realizar cualquier tipo de donación, incluso enviar libros, diccionarios, pizarras... no es necesario enviar dinero! 

El dinero está gestionado por la organización One degree forward (podéis informaros en su web http://onedegreeforward.org/), garantizando de esta forma que el dinero ha ido destinado íntegramente a la compra de bicicletas, linternas, cuadernos, etc... mediante recibos de compra y fotografías! 

¡¡Gracias por vuestro tiempo!! 

Me gustaría creer, que muchos de ellos llegarán a obtener los suficientes conocimientos como para poder realizar buenas obras en sus comunidades. Que pudieran estudiar mediante un sistema de enseñanza clásico basándose en la optimización de los recursos naturales que esta tierra nos ofrece, generando cultivo, recibiendo formación acerca de las energías renovables, para que el futuro de sus pueblos llegue a ser próspero y salgan de la pobreza en la que viven. Que puedan recibir formación acerca de la importancia del reciclaje y del cuidado del medio ambiente. Que puedan enseñar a sus vecinos a que haya unos controles mínimos de sanidad e higiene, para no contraer enfermedades.... y para ello, los niños tendrán que realizar sus estudios superiores fuera de Samrong Village. 

Sería una pena que pasara como en los países a los que llamamos "evolucionados o desarrollados", donde el único objetivo y lo que principalmente se inculca a los niños es que deben ser el número uno, para llegar alto en una compañía, ganar mucho dinero para poder poseer cosas materiales y donde los buenos principios, los verdaderos valores y las buenas obras, en la mayoría de casos, quedan olvidados en el baúl de los recuerdos... que estos chicos salgan de sus pueblos, vayan a la ciudad para aprender, pero que regresen para poder aplicar todo su aprendizaje y ayudar a la comunidad a crecer y mejorar, y que Camboya llegue a convertirse en un país próspero y lleno de oportunidades!!! 

Quizá sea una soñadora... pero quién NO SUEÑA, tampoco VIVE!! 

Yo continuo, desde Siem Reap, colaborando con Laim en la actualización de su nueva Web (BambooGrass) y en todo lo que pueda o necesite de mí!

En unos días partiré hacia Phnom Penh, Capital de Camboya, para ver si puedo colaborar con una ONG española. 

¡¡Desearme suerte chic@s!!
¡Gracias a tod@s por seguirme ;-)!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Uff, amiga impresionante!! Los pelos de punta de leer tu experiencia y por unos momentos ponerme en tu piel gracias a tus palabras llenas de sentimientos. Increíble ver en tus fotos la vida en ese pueblo sin las cosas básica como, Agua, luz... pero más impresionante aun ver esos niños sonreír continuamente. Te hace pensar y mucho en las injusticias y la desigualdad en la q se vive.
Pero estoy segura q has aprendido mucho de ellos y ellos de ti.
Te deseo mucha suerte en tu próximo camino!! Te quiero! Alicia.

kylethevagabond dijo...

Lara,

Muchas gracias por los fotos del pueblo, los niños, y la escuela. Soy el fundador de One Degree Forward (conjunto mi padre), y te agradecemos por le mención de nuestro sítio en el Web. Vivimos en Hawaii y solo podemos visitar a Samrong una vez por año, y disfrutamos mirando a los fotos del pueblo, Laim, Sophy, y los niños.

Como dices, la mejor manera apoyar los estudiantes de Samrong es con una donación en nuestro sítio de Web, y todo el dinero va directamente a la escuela y los niños. Samrong es un lugar muy especial, y como demuestras con los niños en tú cumpleaños, todos en el pueblo tienen corazónes grandes. Me alegría que pase buen tiempo, y gracias por el apoyo en la escuela.

Si estás en Phnom Penh, tenemos otros estudiantes quien apoyamos alla tambien. En particular, hay una estudiante se llama Mony quien habla buen inglés, tiene veinte cuatro años, y ella es un buen recurso por información sobre mujeres viviendo en el capital. Si quieres pasar tiempo con una estudiante de la Universidad digamos y podemos escribir con los detalles de contacto.

Otra vez, muchísima gracias por trabajando en Samrong, y buena suerte con el resto del viaje. Si quieres mantener en contacto, nuestro correo es onedegreeforward@gmail.com. Ciao, y que le vaya bien!

Kyle